Corrección a la frase; “ese decreto horrible”
A continuación una breve traducción del comentario de Gordon H. Clark a la confesión de Westminster [1] del el capítulo tres, el decreto eterno de Dios: La confesión: Por el decreto de Dios, y para la manifestación de su gloria, algunos seres humanos y ángeles son predestinados y pre-ordenados para vida eterna, y otros pre-ordenados para …