“Los hombres siempre han tenido que elegir entre dos métodos de cambio social: regeneración o revolución. El cristiano busca primero disciplinarse a sí mismo según las normas de DIOS. Luego proclama el Evangelio e intenta implementar pacíficamente las leyes de DIOS en la vida de su cultura, confiando en el Espíritu de DIOS para el éxito de sus esfuerzos. Sabe que no hay y nunca habrá una sociedad perfecta en esta vida. Él sabe que el Reino de Dios se esparcirá como la levadura en el pan, no por explosiones masivas y perturbadoras sino por una penetración gradual. Él sabe que la justicia, la rectitud y la paz son el resultado del derramamiento del Espíritu en el corazón de los hombres (Isaías 32: 15-18); Por lo tanto, la estructura jurídica de una nación es, un indicador, no una causa, del carácter nacional.” David Chilton
La Regeneración como Método de Cambio
La regeneración, para el cristiano, produce una disciplina personal basada en las normas de Dios. Se busca un cambio interno que alinee el espíritu y el comportamiento del individuo con los principios divinos. Este enfoque pone énfasis en la transformación personal y espiritual como cimiento para un cambio social más amplio. La idea es que al proclamar el Evangelio y luego los conversos implementen pacíficamente las leyes divinas en la vida cultural, se puede confiar en el Espíritu de Dios para el éxito de estos esfuerzos.
Chilton destaca que el cristiano reconoce que la perfección social es una meta inalcanzable en la vida terrenal. Sin embargo, esto no desanima el esfuerzo por lograr un cambio positivo. La reconstrucción Cristiana es vista como un proceso gradual, similar a cómo la levadura se esparce en el pan, promoviendo un cambio paulatino pero firme en la sociedad.
La Revolución: Un Camino Contrario
En contraste, la revolución se presenta como un cambio abrupto, una alteración masiva y rápida de las estructuras sociales y políticas. Es un método que, a primera vista, puede parecer efectivo, pero Chilton subraya que no se alinea con los principios cristianos de paciencia, fe y transformación interna.
La Importancia del Espíritu
Un punto central en la reflexión de Chilton es el papel del Espíritu en el cambio social. Cita Isaías 32:15-18 para destacar que la justicia, la rectitud y la paz son el resultado del derramamiento del Espíritu en el corazón de los hombres. Esto implica que el cambio real y efectivo comienza en el interior de los individuos, a través de un proceso de transformación espiritual.
La estructura jurídica de una nación, argumenta Chilton, es solo un indicador del carácter nacional, no una causa. Esto significa que un cambio en las leyes y estructuras externas no garantiza un cambio profundo en la sociedad. La verdadera transformación viene de un cambio interno, del derramamiento del Espíritu en el corazón de los hombres.
Conclusión
La reflexión de David Chilton ofrece una perspectiva profunda y matizada sobre el cambio social desde un enfoque cristiano. Subraya la importancia de la regeneración personal y espiritual como base para un cambio social efectivo y duradero. Aunque las estructuras externas, como las leyes y las instituciones, juegan un papel en la sociedad, Chilton argumenta que el verdadero cambio surge del interior de los individuos, guiados por el Espíritu de Dios. Este enfoque promueve un cambio gradual y constante que, aunque puede parecer lento, lleva a una transformación más profunda y perdurable en la sociedad.